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PRONUNCIAMIENTO DEL COLEGIO DE PROFESORES DEL PERÚ, FILIAL LIMA METROPOLITANA ANTE LOS CASOS DE VIOLACIÓN QUE FUERON VÍCTIMA 524 NIÑAS AWAJUN.

Como miembros del CPPe, Región Lima Metropolitana, respetuosos de nuestra Constitución Política y los Derechos de los Niños y Adolescentes, rechazamos las referidas declaraciones del Ministro de Educación, Morgan Quero y de la Ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, Teresa Hernández quienes denominaron como “prácticas culturales” a las denuncias de violaciones de niñas en la Comunidad Awajún en Condorcanqui, región Amazonas.

En este sentido, nos dirigimos ante la opinión pública para expresar los siguientes puntos debido a la gran transgresión de derechos fundamentales de los niños, niñas y adolescentes:

  1. Condenamos enérgicamente cualquier forma de violación o acoso escolar perpetrado por maestros hacia las niñas. Estos actos son violaciones graves de los derechos fundamentales que están protegidos tanto por la legislación nacional como por convenios internacionales como la Convención sobre los Derechos del Niño, a la cual Perú es signatario.
  2. La Constitución Política del Perú garantiza la igualdad sin distinción y la protección para el desarrollo físico, mental y social de los niños y adolescentes. Además, el Código de los Niños y Adolescentes (Ley 27337), establece que en su interpretación y aplicación se deben tener en cuenta los principios y disposiciones de la Constitución Política del Perú.
  3. Es profundamente perturbador y lamentable saber del caso de las 524 niñas de origen Awajún, de la Provincia Condorcanqui en Amazonas, que han sido víctimas de violación y contagiadas de SIDA. Estos actos son inaceptables y deben ser condenados conforme establece la normatividad vigente, para garantizar que se haga justicia y se proteja a las víctimas.
  4. Instamos a las autoridades peruanas a actuar con la mayor celeridad y determinación, para investigar estos crímenes, brindar el apoyo necesario a las víctimas y sus familias, y asegurar que, los culpables reciban el castigo que merecen según la Ley.
  5. Es imperativo que reforcemos los mecanismos de protección para los niños y adolescentes en el Perú, especialmente en las comunidades vulnerables, para prevenir que tales atrocidades no se repitan. La educación debe ser un refugio seguro de conocimiento y crecimiento, no un lugar de miedo y trauma; debe ser un espacio para el desarrollo integral de todos los estudiantes, libre de cualquier forma de violencia o discriminación.
  6. Nos solidarizamos con las niñas Awajún y sus familias en estos momentos difíciles y como Orden Profesional, nos comprometemos a luchar por un futuro donde todos los niños puedan vivir y aprender en paz y seguridad.
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